Paneles solares para calentar el agua de la piscina de forma ecológica
Artículo revisado por el Comité
Estudiar a fondo cuáles son las condiciones luminosas de la zona geográfica en la que nos encontramos, así como determinar el tamaño exacto de la maquinaria, es indispensable sí se quiere obtener de los paneles solares un resultado inmejorable.
Aunque se trata de instalaciones cuyo coste de inversión inicial puede ser un poco elevado, el rendimiento y el ahorro que se obtienen con el uso de este tipo de aparatos los convierten en aptos para casi todos los bolsillos. Estudiar a fondo cuáles son las condiciones luminosas de la zona geográfica en la que nos encontramos, así como determinar el tamaño exacto de la maquinaria, es indispensable sí se quiere obtener de los paneles solares un resultado inmejorable.
Una de las mejores opciones para aprovechar al máximo la radiación electromagnética procedente del Sol es la instalación de este tipo de placas. Aunque existen varios tipos de paneles solares, todos ellos están conformados por colectores que, a través de las celdas o las células fotovoltaicas, consiguen transformar la luz procedente del astro en electricidad. Gracias a la instalación de este sistema, el agua puede llegar a aumentar su temperatura desde los 3º hasta los 7º centígrados. Una solución eficaz, del todo ecológica y cuya fuente de energía es permanentemente gratuita.
La norma básica para saber cuántos aparatos acumuladores de energía son necesarios para nuestra piscina se centra en el tamaño total de la pileta. La suma de las superficies de los diferentes colectores deber alcanzar, como mínimo, la mitad de la superficie de la piscina, aunque es evidente que cuantos más paneles sean incorporados mayor rendimiento podrá obtenerse de la instalación. Otro factor a tener muy en cuenta para mejorar los resultados de su puesta en marcha es la orientación, ya que en función de la climatología y del punto geográfico en el que mayor horas de luz se recojan al día variará la cantidad de energía que pueda acumularse. Si los colectores están orientados hacia el este o el oeste, se necesitará una cantidad mayor para obtener el mismo aumento de temperatura que se consigue con una ubicación situada hacia el sur.