¿Cuáles son las principales energías renovables?
Artículo revisado por el Comité
Las energías renovables son aquellas no contaminantes que emplean materias primas de origen natural que se alzan como inagotables porque podrían regenerarse por medios naturales.
Las más conocidas hasta el momento son:
- Energía solar: Es, probablemente, la más conocida, investigada y accesible, ya que emplea la luz –energía fotovoltaica- y el calor –energía térmica- que proporcionan los rayos del sol para generar electricidad u otros tipos de energía. Los sistemas que se utilizan son diferentes y especializados y favorecen usos tanto industriales como domésticos.
- Energía eólica: Es la que se obtiene aprovechando la fuerza del viento a través de aerogeneradores o molinos de viento. En las últimas décadas se está trabajando especialmente en el desarrollo de la instalación de estos parques eólicos mar adentro para la obtención de energía eólica marina.
- Energía hidráulica: Emplea la energía potencial que se acumula en los saltos de agua para generar energía eléctrica, empleando un sistema inspirado en el que, desde hace siglos, se utiliza en las centrales hidroeléctricas –que aprovechan la energía del agua de los ríos para poner en marcha diferentes generadores-.
- Energía de la biomasa: Aprovecha tanto la materia orgánica vegetal y animal como los residuos de origen agroindustrial para producir energía. Es una de las menos desarrolladas pero de las que parecen tener mayor futuro, sobre todo en el ámbito doméstico dada la sencillez y accesibilidad de sus fuentes energía.
- Energía marina: El mar es, en sí mismo, una fuente de la que se pueden aprovechar diferentes elementos para desarrollar energía. Entre ellos se encuentran las corrientes marinas y el movimiento de las mareas –mareomotriz, que es una de las energías más desarrolladas-, las olas –que permiten producir energía undimotriz- o, incluso, la diferencia de temperatura que existe entre las aguas más profundas y la superficie –energía maremotérmica-.
- Energía geotérmica: Es una de las menos conocidas y, actualmente, de las menos desarrolladas debido a lo costoso de su extracción, ya que es la que se puede obtener del calor que se desprende del interior de la tierra –está ligada, principalmente, a los volcanes, las aguas subterráneas termales, etc.-.